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Ya has aprobado el PER, has hecho suficientes prácticas y maniobras náuticas aparte de las que en su momento te exigieron para la obtención del título. Te sientes seguro de tus capacidades. También has leído todo lo que he escrito en el post anterior sobre los gastos de compra y de mantenimiento… Y a pesar de todo quieres seguir adelante… pues muy bien sé bienvenido a este club.

Una vez que has tomado la decisión de comprar, ahora viene la terrible elección… Y ahora además tenemos una increíble oferta de barcos de segunda mano como consecuencia de la crisis. La primera y más fácil de las elecciones es la de «vela» o «motor» , pues eso es algo que normalmente todo el mundo tiene claro.

No obstante si aún no lo tienes claro té voy a aclarar algunas cosas para que te ayuden a decidir: MOTOR El desplazamiento es mucho más rápido El consumo de combustible es alto o muy alto. No hay que estar pendiente de velas y viento Tiene diseño adecuado para pescar y tomar el sol Si se estropea el motor… Hay que pedir remolque VELA El desplazamiento es más lento Es la navegación más natural y auténtica El consumo de gasoil es casi insignificante No hay límites en la distancia a recorrer Hay que estar pendiente del viento y las velas. El motor no es fundamental.  Una vez decidido si nos convertimos en «trapero» o «motero», cosa relativamente fácil, pues los conceptos de navegación son muy distintos, ahora vamos a seguir.

El siguiente escollo es elegir si compramos barco nuevo o de segunda mano. Aquí desde luego manda » don dinero» pues las diferencias son muy significativas. En el mercado de segunda mano se encuentran barcos muy bien cuidados y con muy pocos años de uso a un precio que ronda la tercera parte de nuevo. Ahora seguimos con la eslora…. Y aquí sí que podemos cometer errores de bulto porque por un lado podemos pasarnos de eslora ( para qué queremos un barco de 15m si vamos a navegar solos y no vamos a ir más allá de Ibiza? ) si hemos cometido este error pagaremos más por el amarre y el mantenimiento general del barco y además las maniobras que tengamos que hacer con el barco serán siempre más complicadas y requerirán más tripulación.

Por otro lado si eres jóven y con ganas de llegar muy lejos puedes optar por comprar un barco pequeño para ir aprendiendo y más adelante cambiar a otro mayor o directamente ir a un barco grande y te ahorras el proceso de venta y compra intermedios. Es muy importante sopesar para qué queremos el barco y a dónde pretendemos llegar con él, es decir tenemos primero que saber cuál va a ser nuestra idea y proyecto de navegación y en función de ese planteamiento comprar el barco que nos conviene. Sería lo que se dice acertar en la diana a la primera. He conocido a muchos armadores que al cabo de uno o dos años han tenido que cambiar de barco buscando una eslora mayor porque se les había quedado «corto» enseguida.

Por regla general cuanto más grande sea el barco más lejos podremos ir con él, pues tendrá más habitabilidad y más capacidad de estiba y sus depósitos de agua y gas-oil también serán mayores. También, no nos olvidemos, juega un papel importante el número de personas que van a ir a bordo normalmente para definir la eslora y capacidad del barco que necesitamos.

Como has podido ver la elección es demasiado subjetiva y yo no puedo decirte si debes comprarte un barco blanco o un barco azul, lo que sí creo es haber plasmado en este post una serie de reflexiones que podrían venirte bien en tu elección. Ten en cuenta que un barco es como una pareja… en principio la elección es para toda la vida…. Pero si te equivocas, también en este caso tiene solución … y pasarà por un importante desembolso económico.

Si después de leer este artículo aún te quedan dudas, cuenta conmigo para ayudarte y aconsejarte en tu elección. Puedes mandarme un mail y te orientaré en lo que pueda.

No te pierdas el próximo post: » Se lo compro a un Broker o a un particular»

Buenos vientos y buena proa…!

Agustin Castañeda
info@velerobandolero.com
Patrón y armador del velero Bandolero.
Capitán de Yate: 4 cruces del Atlàntico a Vela y 1 del Cabo de Hornos.
Más de 30.000 millas náuticas navegadas.